Otros actos que quedan perdidos en la noche del silencio.Estoy de vuelta.
¿Qué si tengo un problema ? Sí, con aquellos que me impiden.
¿Quién te crees que eres para pararme?
Y es que yo no me rindo.
Este es mi grito, por que es rabia ,impotencias.
Pues uno de mis yo lo que se refleja en el espejo al mirar.
Asumirlo,mi puño apretar,y en el camino hacia crear, hechos y más hechos.
¡Ja! No sabes, tan fuerte que piso, que huella no es lo que dejo, sino raíces.
Raíces que he de romper.
¡Que se quiebren, que desaparezcan! ¡Yo quiero crear nuevas!
Esas ganas de gritar hasta romper, destrozándote la garganta. Quebrar el mundo en dos.
miércoles, 10 de abril de 2013
No es por capricho
Tu abres
la boca y sueltas lo primero que se te pasa por la cabeza y ni siquiera te
paras ni un segundo a pensar sobre lo que hay detrás de la fachada de cada
persona.
Detrás de cada una hay una historia, y no te puedes permitir el lujo de acusar a alguien sin saber de qué material está hecha esa persona de la que te estás riendo o a la que estás humillando (eso no se hace).
Detrás de cada una hay una historia, y no te puedes permitir el lujo de acusar a alguien sin saber de qué material está hecha esa persona de la que te estás riendo o a la que estás humillando (eso no se hace).
¿Tienes una mínima idea de lo que supone no ser capaz de expresar lo que
piensas?
Yo, como toda persona de este mundo, siento, padezco, pienso y sufro, pero tú no sabes la putada que es tener que guardarte todo en la garganta y no poder sacarlo fuera por miedo a lo que dirán y a la reacción de los demás; créeme que no lo hago por gusto, si ahora me callo es por que alguna vez abrí la boca, me la taparon a la fuerza y me hicieron daño. Desde entonces, erróneamente, creo que la solución es decir que sí absolutamente a todo: no rechistar, no opinar y no darle rienda suelta a la imaginación.
Siempre
hay una voz por detrás que te impide que hagas lo que te apetece y así es como
poco a poco te olvidas de ti mismo, de quién eres, de dónde vienes, por qué
estás dónde estás... Y a pesar de que nadie da un duro por ti, por que
casualmente siempre escoges a los que te hacen daño, tu sigues ahí, soñando que
algún día, alguien va a venir simplemente a decirte:
"Me importas, quiero cuidarte
y pelearía con quien fuera para mantenerte a salvo"
En consecuencia, te pasas todo el
día con la música a toda hostia, para que nadie te escuche llorar,
destrozándote la garganta y, a su vez, solo pides al mundo que nadie te llame,
ni te pida explicaciones, pero estas deseando que suene el móvil y
alguien te pregunte: "¿Cómo estás?"
Menudo
caos mental, ¿eh? Estar peleado consigo mismo, una jodida pesadilla.
Mientras
tanto, otros se empeñan en seguir pensando que es por capricho, creen que es
muy fácil dejar los pensamientos a un lado y seguir...
lunes, 1 de abril de 2013
Sensación de Monotonía
Te despiertas con un tímido rayo de luz asomándose entre tus cortinas, llegando a tu cara.
Respiras profundamente, te estiras y miras hacia el techo una vez más.
Has sobrevivido otra noche más
Las 8:00, como siempre.
Vas parada en el metro, sujetándote a lo que puedas, o a veces sentada, con la mirada hacia el suelo. Tu mente no está ahí, se ha ido de paseo por tu lugar especial, donde uno es libre.
Pasan horas, y horas... Y más horas...
¿Ya es la segunda clase?
Tan rápido pasa el tiempo.
Es curioso que, a diferencia de cuando pasas un momento difícil, se alarga dolorosamente, mientras que cuando estás sobre las nubes, acaba en un abrir y cerrar de ojos.
La quinta hora, la sexta... Tú no estás ahí. Tu cuerpo lo está, pero tu mente se sigue escapando.
No ha estado en todo el día.
Has estado en tu maravilloso lugar, con tus inolvidables recuerdos, lo sé.
15:30
"¿Qué tal el día?"
- Siempre la misma pregunta, con la misma respuesta -.
"Bien, como siempre".
Pasan horas, horas muertas, distracciones tras otras, pasan mas horas... Y más.
¿Para que empezar algo que no terminarás?
Se apagan las luces, dejando solo el destello de la oronda Luna en tu pared.
Miras hacia la ventana, te das la vuelta. Estás cansada de otro día monótono.
Mañana será un día como otro. Un día como hoy.
Quizás diminutos cambios, o quizás nuevos y grandes cambios.
¿Se puede escoger romper la monotonía?
Y si es así, ¿caminarías junto a mi? No quiero estar sola.
Has sobrevivido otra noche más
Las 8:00, como siempre.
Vas parada en el metro, sujetándote a lo que puedas, o a veces sentada, con la mirada hacia el suelo. Tu mente no está ahí, se ha ido de paseo por tu lugar especial, donde uno es libre.
Pasan horas, y horas... Y más horas...
¿Ya es la segunda clase?
Tan rápido pasa el tiempo.
Es curioso que, a diferencia de cuando pasas un momento difícil, se alarga dolorosamente, mientras que cuando estás sobre las nubes, acaba en un abrir y cerrar de ojos.
La quinta hora, la sexta... Tú no estás ahí. Tu cuerpo lo está, pero tu mente se sigue escapando.
No ha estado en todo el día.
Has estado en tu maravilloso lugar, con tus inolvidables recuerdos, lo sé.
15:30
"¿Qué tal el día?"
- Siempre la misma pregunta, con la misma respuesta -.
"Bien, como siempre".
Pasan horas, horas muertas, distracciones tras otras, pasan mas horas... Y más.
¿Para que empezar algo que no terminarás?
Se apagan las luces, dejando solo el destello de la oronda Luna en tu pared.
Miras hacia la ventana, te das la vuelta. Estás cansada de otro día monótono.
Mañana será un día como otro. Un día como hoy.
Quizás diminutos cambios, o quizás nuevos y grandes cambios.
¿Se puede escoger romper la monotonía?
Y si es así, ¿caminarías junto a mi? No quiero estar sola.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)