lunes, 3 de junio de 2013

Abre los ojos

Nada traduce la tempestad de mi alma y el llanto desesperante en el que se encuentra mi corazón.

Todo son complicaciones, si no vas a cumplir algo no lo prometas.

Porque más que entre el cielo y el suelo, estoy entre la espada y la pared.
No encuentro mi camino, o quizás lo tuve delante de mis narices, mas no lo supe ver o me distraje. No sé qué decisión tomar, por que todo lo que supongo me perjudica de algún modo.

Me encuentro en el agobiante día a día, en el desierto de la frustración, por que cada vez que nuestras miradas se encuentran o me rozas, por un pequeño instante y tan dulce instante, mi pensamientos se vuelve celestial, pero vuelves a esquivarlo y te vas, y se queda de nuevo en un sombrío desierto y convirtiese así mi apenada alma en miserable entrando en mi corazón el dolor mas penoso en que jamas me había encontrado.

Son tantas las veces, que se repite que ni las esperanzas me acompañan: habrá que abrir los ojos y no soñar un cielo inalcanzable.

No hay comentarios

Publicar un comentario

© Cuaderno de heroína
Maira Gall